A pesar de llevar muchos años viviendo en Ibiza, nunca había visitado Sant Agustí des Vedrá. Sencillamente porque no se me había presentado la ocasión. Y es que es muy complicado conocer a alguien que viva en este núcleo urbano. Sant Agustí está compuesto de apenas cuatro o cinco edificaciones. Eso sí, casas antiguas de una gran belleza que coronan las tranquilas calles hasta llegar a la iglesia de Sant Agustí.
Como llegar a Sant Agustí.
Pues si les comentaba que nunca había estado allí, no era precisamente por ser un pueblo muy escondido. Sant Agustí se encuentra situado a mitad de camino entre Sant Josep y Sant Antoni. Tan sólo deberemos tomar la carretera hasta llegar al aviso que nos indica la entrada al núcleo urbano. Un poco de cuesta hasta llegar a la cima del cerro, donde poco a poco se empieza a dibujar la silueta de la torre de la iglesia. Una zona de aparcamientos bastante amplia para las dimensiones del lugar nos dá la bienvenida. Estamos delante de la iglesia y hay boda, así que cogemos la cámara de fotos y damos un largo paseo.
Qué encontraremos en Sant Agustí Ibiza
Resulta curioso como la mayoría de los núcleos urbanos de interior están situados en lugares estratégicos, con una visión completa de todo lo que pasa a su alrededor. Y no creo que sea fruto de la casualidad. Sant Miquel o Sant Rafael, por poner algunos ejemplos, mantienen desde sus iglesias algunas de las vistas más espectaculares que podemos encontrar en Ibiza.
Desde la iglesia de Sant Agustí, podremos recrearnos en toda la típica campiña ibicenca, con bosques de pinos cubriendo los montes que lo rodean. En el interior, paz absoluta. Algunas callejuelas empinadas dan paso a restaurantes que abren sus puertas al anochecer en el ambiente rústico que, a simple vista, nos parece sacado de una novela del siglo diecinueve, fecha en la que se construye la iglesia.
De vuelta comprobamos que la boda ha finalizado. Un Rolls Royce espera a los recien casados en un ambiente de lo más selecto. Y es que estar en Ibiza y encontrar un pueblo que permita este nivel de intimidad para cualquier evento, no tiene precio. Ni Sant Agustí tampoco.
Más información en la ficha de Sant Agustí
