El contenido de una web es el elemento más importante. Va a afectar al desarrollo del proceso de producción, de posicionamiento y al éxito de nuestra web frente al posible cliente. Lamentablemente, se tiene la idea equivocada de incluirlo como último elemento del proceso, causando un sobrecosto inútil e innecesario.
«Tú ve diseñando que ya te pasaré el contenido»
Sí. Un año de estos. Y cuando lo hagas, nos daremos cuenta de:
- El aumento de secciones, que ya no caben en el menú: rediseño.
- Las páginas hablarán de temas tan distintos que no tendrás sentido, y al dividir aumentaremos el número de páginas: más producción.
- En el lugar donde iba una frase de apenas dos líneas, ahora tenemos un perfecto párrafo que descuadra todo el diseño: más rediseño.
- En castellano ha quedado muy bonito pero el inglés es más corto y el alemán más largo: seguimos rediseñando.
- Para arreglar algunos desajustes, habrá que cambiar el contenido o el diseño: aumento del ritmo cardíaco.
El contenido de una web es lo primero que debemos desarrollar. Texto, vídeo, imágenes, logo (por supuesto) son nuestra forma de llegar al cliente. El resto debe ser organización y pura decoración. Nadie va a discutir que una página con un diseño atractivo es más interesante que una web tosca y mal hecha. Pero es mucho más cierto que primero hay que entrar en la web y después atraer con el contenido para convertir la visita en un cliente potencial.
Un ejemplo. Una web de productos ecológicos elige un diseño espectacular con poco contenido, mucho diseño, que ocupe una pantalla. Otra se decide por reducir el diseño e introducir información sobre los beneficios de los productos que ofrece, su elaboración y proceso hasta llegar a la tienda y alguna receta secreta. ¿Aún no te has convencido? Piensa en cinco páginas de las que te atraigan su contenido y otras cinco con diseños espectaculares. O visita tu lista de páginas favoritas en tu navegador.
Veamos que piensan empresas como Coca Cola, Nike , Disney o Ferrari, marcas que invierten millones en publicidad corporativa y donde años atrás los diseños y animaciones ocupaban la mayor parte de su contenido.
Como crear el contenido de una web.
Estructura, titula y desarrolla. No tiene más secretos.
Contenido para un producto
- Titulo
- Imagen
- Descripción
- Usos
- Características técnicas
¿Y lo tengo que escribir yo?
Pues alguien que conozca bien el producto, la empresa o la sección a desarrollar. Las pautas a seguir son simples:
- Intenta ser claro y conciso.
- Escribe frases no excesivamente largas pero tampoco un telegrama.
- Plantea dudas al mismo tiempo que las resuelves.
- Habla desde tu experiencia y la de tus clientes. No he visto mujeres publicitando maquinillas de afeitar para hombres, ni hombres vendiendo compresas. Si un producto no es bueno para ti, o no lo has probado tú, se lo vas a vender a Rita.
- Muestra las ventajas y desventajas de un producto. Una desventaja puede presentarse como un aspecto positivo, recuerda que estas vendiendo. Una cámara de fotos no presenta un escaso menú. Tiene un menú simplificado perfecto para principiantes. Tampoco tiene una carcasa de plástico. Es un producto ligero.
- Recuerda para que cliente estas hablando. Tu mercado puede requerir un lenguaje técnico o todo lo contrario. Puede que tu público entienda sobre el hueco poplíteo de la extremidad inferior o puede que prefiera un «detrás de la rodilla».
- Evita que tus páginas sean un copiar y pegar. Se puede decir lo mismo de muchas formas.
- Pasa tu texto por un corrector ortográfico. He visto periodistas patear un diccionario y errores al escribir los cometemos todos.
Introducción de datos
En páginas webs con la misma estructura, la introducción de datos puede ser un proceso sencillo. Si cada página tiene un formato distinto, la cosa se puede complicar.
Cuando hablamos de introducción de datos siempre hablamos del primer caso, como una tienda online. Suele ser un proceso manual, salvo que los datos se tomen de algún catálogo. No recomiendo que utilicéis contenido que ya ha sido publicado en Internet. Hay muchas formas de generar contenido nuevo.
¿Cómo voy a introducir los datos?
Antes de pegarte la gran paliza en un procesador de textos, deberías hablar con el programador. Se pueden utilizar sistemas automatizados para el proceso que ahorran cientos o miles de horas de escritura. Si no es viable, al menos infórmate sobre la mejor forma de organizar tu contenido. Una carpeta de imágenes repleta de archivos incrementa el presupuesto de Iboprufeno.
Dependiendo del gestor de contenidos que vayas a utilizar y las opciones que presente tu web, vas a necesitar unos conocimientos mínimos para moverte con soltura. No te preocupes porque, si está bien hecho, el proceso es bien sencillo e intuitivo.
Siempre te queda la opción de contratar este paso, pero recuerda que algunas veces, en especial en carritos de la compra, va incluido en el presupuesto. Y ahora que tenemos claros nuestros contenidos, ¿qué tal si pasamos al diseño?
